Pombagira o su culto se agrupa en el brazo izquierdo del Candomblé. La Kimbanda. Ese brazo se asocia al bajo astral brasilero, al culto de los antepasados, a la conexión mediúmnica con los muertos.
La palabra Kimbanda proviene del dialecto Kimbundu de las tribus bantúes de Angola, Kia-dianmba era el nombre de los sacerdotes hechizeros de estas tribus, los mismos que trabajaban en la noche y se dedicaban al trance con los antepasados, trasmitían sus mensajes a familiares y a la comunidad bantú.
El Kia-dianmba era muy respetado porque también podía trabajar esperitualmente con estos espíritus.
Con el tráfico indiscriminado de esclavos muchos de estos bantúes fueron a América con todos sus conocimientos y costumbres, se mezclarían con el Caboclo autóctono o brasileño.
El punto en común entre el índio y el africano era el culto y la devoción a los ancestros, a partir de esto el nzambi de los Bantúes y el Tupá de los caboclos se fusionaron.
Aquí no acaba la historia, a partir de aquí los bantúes dieron a sus ancestros el nombre de Exú, palabra para denominar al comunicador al mensaJero entre los vivos y los muertos, el puente entre el mundo humano y el mundo espíritual,
También habían ancestros femeninos que se llamaban Pombu njila, palabra de origen Bantú que significaba caminos, atajos, cruces de caminos....más tarde con la deformación del idioma el nombre pasó a ser Pombogira, y más tarde Pombagira, el idioma portugués transformó la palabra.
Con la colonización, y el crecimiento de la urbanidad y los cambios sociales en Brasil, la Kimbanda empieza a florecer en su máximo explendor en el siglo IXX, el bajo astral brasilero empieza a fecundar todas las Pombagiras y los Exúes con su respectivo povo o pueblo, es en los años 60 con el feminismo que la Kimbanda acapara la atención de la sociedad, especielmente la femenina, por lo transgresora y reinvicativa de su entidad Pombagira, representante del emponderamiento femenino.
Este culto ha incorporado nuevas Entidades femeninas como Maria das navalhas procediente de los años 20 o nuevas entidades masculinas llegadas al bajo astral brasilero como Exú zhé Pilintra, originario de los años 40, la descendencia de esta entidad son los actuales dueños del bar en Río, Gente da noite. Con este dato nos encontramos que es una religión que ha ido evolucionando e incorporándo más y más entidades, a ese rico astral brasilero. Es una religión dinámica en contínua evolución y cambio. No anquilosada o estàtica como otras religiones. La vida y la evolución rueda constántemente en el cambio.